Lia

Hablar de ella, en tercera persona, siempre me ha parecido la manera más razonable de hablar de . Nunca e llegado a conocerme tanto. Por eso hoy os cuento su historia. La historia de la chica qe creía qe volaba cuando movía los brazos muy rápido. La chica qe creó un mundo de historias de mentira en un cuaderno. La chica qe sonreía por obligación. La chica que creció de repente un día y se sintió más mayor qe nadie. La chica que estudiaba, pero no matemáticas, lengua ni ciencias ... estudiaba la felicidad práctica y teóricamente. La chica qe se enamoró de la vida después de mucho tiempo. La chica qe espiaba a los enamorados y se sintió grande el día que la espiaron a ella. La chica esa que se lo creía todo y que no sabía seguir si alguien no la empujaba primero. La chica que soñaba y soñaba y se sentía pequeñita al lado de los demás. Hoy os contaré su historia, cotilleando en su cuaderno. Simplemente, relajaos, y descubrid como ella ve el mundo. Quizás os sorprende.

lunes, 18 de agosto de 2014

"Nadie me ha besado como tu, me decías.
Y sin embargo, prefieres no besarme"

 La luz de Candela - Monica Carrillo 







"Te mereces", dicen. "Tu necesitan", susurran. "No se busca", explican. 

Vamos a despertar una vez mas, a dejar bajo llave esas casualidades que ya no existen.

jueves, 27 de marzo de 2014

En la época en la que todo parece una guerra de sin sentidos en la cabeza. Con esas pequeñas crisis de personalidad que no sabes muy bien como encajar. He decidido que puesto a comportarnos como "niños chicos", vamos a aprovechar este momento para echar la culpa a alguien o algo. 
La culpa es de la PRIMAVERA.

¿Y ahora qué?

Pues ahora, cuando tu mente está lúcida y allanas el terreno de tu propio camino, acabas encontrándote con la misma piedra, echa añicos, obligándote a cometer (tu misma) ese error una vez más. 
Los pensamientos, "Qué estúpida" "Que masoquismo", nublan tu mente otro día más.

Sin embargo, es cuando caes en la cuenta de que no puedes echarle la culpa a nada ni a nadie. De que todos los sin sentidos que has estrellado en la pared, se pueden quitar con la "terapia de miradas" entre personas que se complementan sin saberlo.

¿Qué haces ahora?

Pues a pesar de dejar aparcados en el último cajón todas las cosas que estos últimos años pensabas que te hacían vivir en una ilusión constante, acabas por entender (una vez más) que son esas cosas las encargadas de encajar los rasgos de una loca personalidad.

¿Y cuales son? 

Pues demasiadas. Pero hasta este momento solo merece estar escrita aquí la posibilidad de CREER en las cosas. En esas personas que te entregan su sinceridad en los ojos. En los abrazos mañaneros de oso que te quitan hasta las ojeras. En un desayuno original. Esos ramos de rosas secas que guardan secretos. En la ropa a medias, tirada por el pasillo. En la inseguridad y en esa persona que te regala parte de su seguridad.
En las personas que recapacitan. En cometer errores y esas personas que te ayudan a no cometerlos. En la intensidad y la multiplicidad de los sentimientos y los actos.

Como veis, puedo estar escribiendo líneas y líneas de las cosas que creo. Sin embargo, ni os importa, ni pretendo contaros mis sentimentalismos (y quizás no sean las mismas que vosotros creéis). 
El objetivo de la parrafada anterior, es haceros conscientes de que si no tienes nada en lo que creer, no te ilusionas. Si no te ilusionas, no te sientes viva. Y ¿a quién carajo le importa si te caes una o doscientas veces? ¿Si lloras sola o acompañada? ¿Si te sientes tan pequeñita que no puedes respirar?. 
Al final, todas esas cosas, pasan a formar parte de tus experiencias, te construyen como persona y son el motor de la capacidad de recapacitar por ti sola.

No dejes de creer en las cosas que te hacen sentir que estás viva. Si tu no lo haces, 
¿Quién lo hará por ti?


sábado, 8 de febrero de 2014

Aquella jodida chispa.

Por algún motivo perdido entre la incertidumbre que tu trajiste hacia mi, volví a esos momentos. Supongo que solo quiero aferrarme a esas fracciones de segundos que me pertenecen, que nadie colocará en segundo, ni tercer lugar. 
Sin embargo, por primera vez caigo en la cuenta de que tengo el control de esto. Y por supuesto, nada es perfecto, aunque sí un poco convencional, una de las principales razones por la que me fascinaba. 

Tu y yo, uno más jodido que otro entendíamos lo que amoldamos a base de palabras que solo lograron chocar contra una pared de sin sentidos. 

Me agrada saber, que al final ambos nos sentíamos como en una rotonda, que intentabas no cesar de mirarme, aunque yo me frenara dándote tiempo, pero hay chispas que pasan a fuego y consumen todo adueñándose descaradas de lo que no les pertenece.

Así que en un intento de escapar, acabo por darme cuenta de que soy quien permitió que el humo recorriera mi piel, y antes de seguir pensando que salvarme era una posibilidad, creo que una parte de mi se perderá en ese camino.

¿Pero y quién demonios la quiere, si provoco ese incendio? 

domingo, 29 de diciembre de 2013

Last year.

Las reflexiones finales de un año, siempre tienen su parte pesimista. Pero he decidido que las mías este año no la van a tener. Y no será por motivos eh, pero estoy cansada de ese lado agónico que no deja de rondar nuestras cabezas, intentando que nos caigamos de rodillas. 
Estoy segura de que caeré, pero con una mano adelante y otra atrás. Supongo que como la mayoría de personas. Pero esta vez, no será como todas aquellas veces que te dicen "Si te caes, tienes que levantarte", por supuesto, pero a mi manera. 
Me voy a levantar, pero sin una sonrisa en los labios. Son falsas sonrisas, y demasiadas personas falsas hay ya, como para pasarme yo por una de ellas, sonriendo sin ganas. Yo, voy a mirar hacia el frente, pestañearé apagando los malos pensamientos hasta dejar salir los abrazos guardados.

Basta ya!, dejad de buscar en otras personas vuestros fracasos propios. ¿No os dais cuenta de que es un jodido error?. Que nadie va a resolver tus problemas, que para eso solo estás tu y solo tu. Vamos a empezar el año aceptando quienes somos y que queremos. Que después de eso, ya vendrá lo que tenga que venir, o no, quien sabe. 
No te canses de renunciar, debes entregarte más. Que esas confusiones tan internas que tienes, te las quito yo con un baile. 

Esto es tan sencillo, como esta frase: "Deja de vivir la vida a través de las personas. Tienes que vivirla a través de tí"

Tu nunca estás, pero se que mañana, ya nunca podrás olvidarte de mi.
http://www.youtube.com/watch?v=r20FVFHMf-0

jueves, 12 de diciembre de 2013

Ese momento en el que tu conflicto interior lucha por dar la cara, debido a que esta viendo ese 
rayo de esperanza.

Todos guardamos cosas que no dejamos ver. Pequeñitas se abren hueco en tu interior, hasta que un día se sienten tan apretadas que pretenden salir de golpe. Puede que salgan de dos maneras: Una, sin control ni sentido alguno, esparciéndose por el espacio perdiendo la importancia que adquirieron. O dos, con la ayuda de esa esperanza, la cual les aporta sutileza, paciencia y las llena de sentido común.

Personalmente, prefiero creer en esa sencilla esperanza que hace amenos los conflictos, hasta consumirlos. Esa esperanza sensata, que un día cometió el error de decir las cosas de broma, cuando le quemaba la piel y sobraba su ropa. Dejó atrás su desajuste, tomando el significado de valor, bien cogidito de la mano del temor. 

Sin embargo, al fin y al cabo, por mucha esperanza presente. Esta refleja su intención y  no expone sus motivos. Cansada de vagar por un circulo de sin sentidos, solo espera encontrar el equilibrio entre mucho tiempo y poco rato.

Encontrarás de todo, menos las explicaciones que crees necesitar. 
Esas solo nacen y mueren en un sitio en concreto. 
En tí. 


miércoles, 27 de noviembre de 2013

Hay dos motivos que mueven la humanidad. Uno es el deseo y otro la envidia. Todo deseamos. Todos hacemos lo que esté en nuestra mano por conseguir esos deseos, sin embargo, cuando lo que deseamos no lo conseguimos, PUMM!, nace la envidia. Todo esto está escrito en la naturaleza.

A veces, cuando sentimos esa envidia, tendemos a creer que tenemos derecho. Que la vida nos debe algo y que no puede negarse.

Pero la realidad nos dicta, que la vida no nos debe nada a nadie. Todo tenemos lo que podemos y si no lo tenemos es por carencia de una lucha. Aquí, queridos amigos, esta envidia pasa a convertirse en deseo.

Así que, hagamos una reflexión. Dejémonos de expectativas malgastadas. Vamos a parar ese reloj que gira entorno a las posibilidades de los demás.Tú, si tu, para de tocar a la puerta de la suerte y dedícate a romper las deudas de palabras que tienes en tu interior. Como dice un artista, "vamos a dejar de buscar alguien que valga la pena, busquemos a quien valga el tiempo, que valga las risas, los sueños, las palabras, que valga las renuncias, los cambios, que valga cada momento".


jueves, 19 de septiembre de 2013

Estaba cansada de no dejar que nadie viera la doble cara del interior de su piel, pero sin embargo, esperaba que alguien lo suficiente "desinteresado" la encontrara por sus propios medios. 
Ella sabía que era esperar algo que no sucedería. En el mundo en el que vivimos, las cosas o se dan "mascadas" y claras, o nadie tiene el interés suficiente para buscar cosas que hoy en día están sobre valoradas por los libros, los cuentos o los pensamientos de solitarias chicas de 15 años, que se volverán unas zorras, por su sentimiento de soledad. 

Bienvenidas señoritas y caballeros al este jodido mundo.

La chica que lucha y no gana, o que gana y nunca lo nota.