Lia

Hablar de ella, en tercera persona, siempre me ha parecido la manera más razonable de hablar de . Nunca e llegado a conocerme tanto. Por eso hoy os cuento su historia. La historia de la chica qe creía qe volaba cuando movía los brazos muy rápido. La chica qe creó un mundo de historias de mentira en un cuaderno. La chica qe sonreía por obligación. La chica que creció de repente un día y se sintió más mayor qe nadie. La chica que estudiaba, pero no matemáticas, lengua ni ciencias ... estudiaba la felicidad práctica y teóricamente. La chica qe se enamoró de la vida después de mucho tiempo. La chica qe espiaba a los enamorados y se sintió grande el día que la espiaron a ella. La chica esa que se lo creía todo y que no sabía seguir si alguien no la empujaba primero. La chica que soñaba y soñaba y se sentía pequeñita al lado de los demás. Hoy os contaré su historia, cotilleando en su cuaderno. Simplemente, relajaos, y descubrid como ella ve el mundo. Quizás os sorprende.

miércoles, 27 de noviembre de 2013

Hay dos motivos que mueven la humanidad. Uno es el deseo y otro la envidia. Todo deseamos. Todos hacemos lo que esté en nuestra mano por conseguir esos deseos, sin embargo, cuando lo que deseamos no lo conseguimos, PUMM!, nace la envidia. Todo esto está escrito en la naturaleza.

A veces, cuando sentimos esa envidia, tendemos a creer que tenemos derecho. Que la vida nos debe algo y que no puede negarse.

Pero la realidad nos dicta, que la vida no nos debe nada a nadie. Todo tenemos lo que podemos y si no lo tenemos es por carencia de una lucha. Aquí, queridos amigos, esta envidia pasa a convertirse en deseo.

Así que, hagamos una reflexión. Dejémonos de expectativas malgastadas. Vamos a parar ese reloj que gira entorno a las posibilidades de los demás.Tú, si tu, para de tocar a la puerta de la suerte y dedícate a romper las deudas de palabras que tienes en tu interior. Como dice un artista, "vamos a dejar de buscar alguien que valga la pena, busquemos a quien valga el tiempo, que valga las risas, los sueños, las palabras, que valga las renuncias, los cambios, que valga cada momento".


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