Lia

Hablar de ella, en tercera persona, siempre me ha parecido la manera más razonable de hablar de . Nunca e llegado a conocerme tanto. Por eso hoy os cuento su historia. La historia de la chica qe creía qe volaba cuando movía los brazos muy rápido. La chica qe creó un mundo de historias de mentira en un cuaderno. La chica qe sonreía por obligación. La chica que creció de repente un día y se sintió más mayor qe nadie. La chica que estudiaba, pero no matemáticas, lengua ni ciencias ... estudiaba la felicidad práctica y teóricamente. La chica qe se enamoró de la vida después de mucho tiempo. La chica qe espiaba a los enamorados y se sintió grande el día que la espiaron a ella. La chica esa que se lo creía todo y que no sabía seguir si alguien no la empujaba primero. La chica que soñaba y soñaba y se sentía pequeñita al lado de los demás. Hoy os contaré su historia, cotilleando en su cuaderno. Simplemente, relajaos, y descubrid como ella ve el mundo. Quizás os sorprende.

martes, 28 de junio de 2011

El plan.

En el cementerio de los libros olvidados, Ivan, encontró un libro diferente al resto. Tenía un aspecto viejo, sofisticado y una tapadera bastante gruesa. En aquel sitio había un ambiente misterioso, pero eso no fue impedimento para que Ivan abriese el polvoriento libro.
Las páginas estaban de un color amarillo claro, debía ser por la cantidad de años que llevaban esos libros allí, entonces en ese momento se dio cuenta de que aquel libro era raro ... sus primeras paginas estaban amarillentas, pero las demás no (como si el propio libro quisiera despistarlo), había dibujado un plano de Barcelona, de Madrid, Toledo, Granada, de todas las ciudades de España e incluso del mundo. No comprendía nada, hasta que comenzó a ver como en esos planos había diferentes líneas de colores, -¿Qué representarán estás líneas?- se preguntó. Había dibujado toda clase de objetos y lugares reales, farolas, esquinas, parques, edificios ... Él seguía sin comprender nada, hasta que después de mirarlo durante semanas lo entendió. Todo estaba escrito en aquel libro. La trayectoria de diferentes personas. Sí claro, resulta difícil de creer, pero Ivan acabo por adivinar que aquel libro era como una especie de fuente de recuerdos y acontecimientos que estaban por suceder. En Aquel libro que sujetaba en sus manos estaba escrito el destino de las personas.
Ni él mismo se lo acababa de creer, pero no tenía otro tipo de explicación. Tras meses de examinar el libro y comprobar si se cumplían los caminos establecidos, verifico su teoría al comprobar que su hermano Daniel iba siguiendo el camino que le pertenecía. Así que poco a poco comenzó a obsesionarse por su propio camino. Un día se cruzo con una chica, la cual le pareció tan especial y bonita que durante el trayecto del autobús no le quito ojo, pero en su camino dicha chica no aparecía más. - "No ! Esto no puede ser así, ella tiene que seguir en mi camino, lo he sentido, sino, ¿por qué siento que pertenece a él?" - pensó. Pero se equivocaba la chica no aparecía más en el plan. Y el libro es fiel al plan. Pero claro, cabezón como era Ivan no iba a dejar que el libro decidiera su destino, así que comenzó a mirar el camino de esa chica; Todos los jueves iba al mismo parque y todos los días cogía el L.20. Por un momento tras observar el plan de la chica, Ivan pensó que era pan comido volver a verla, pero sin embargo, el Plan no iba a permitirlo. El libro cuando un destino está preestablecido hace todo lo posible porque suceda así. Cuando alguien intenta cambiarlo, enseguida se improvisan una serie de alteraciones para evitar que el camino se desvie de su plan original, por ese motivo, cuando pensamos que se nos ha escapado el autobús, que perdimos el tren o que se nos perdieron las llaves del coche, no es coincidencia, son las desviaciones que el plan improvisa para que sigamos nuestro propio camino. Solo existe una manera de cambiar el plan. Y es a través de un beso. No un beso corriente, sino un beso que integre todo lo que ambas personas sienten y quieren en el mismo momento.

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