Lia

Hablar de ella, en tercera persona, siempre me ha parecido la manera más razonable de hablar de . Nunca e llegado a conocerme tanto. Por eso hoy os cuento su historia. La historia de la chica qe creía qe volaba cuando movía los brazos muy rápido. La chica qe creó un mundo de historias de mentira en un cuaderno. La chica qe sonreía por obligación. La chica que creció de repente un día y se sintió más mayor qe nadie. La chica que estudiaba, pero no matemáticas, lengua ni ciencias ... estudiaba la felicidad práctica y teóricamente. La chica qe se enamoró de la vida después de mucho tiempo. La chica qe espiaba a los enamorados y se sintió grande el día que la espiaron a ella. La chica esa que se lo creía todo y que no sabía seguir si alguien no la empujaba primero. La chica que soñaba y soñaba y se sentía pequeñita al lado de los demás. Hoy os contaré su historia, cotilleando en su cuaderno. Simplemente, relajaos, y descubrid como ella ve el mundo. Quizás os sorprende.

jueves, 14 de abril de 2011

Ríe, llora, salta, llega el primero a donde quieras; nunca te pares, juega, cae si es necesario y vuelve lo a hacer. Salta a la comba a tus dieciocho años, explota pompas de jabón con la lengua!, corre, corre todo lo que te pida el alma y corre a coger las gotas antes de que toquen el suelo.

Mira a esa amiga con la cual juntas sois un peligro para la sociedad y disponte a saltar los pasos de cebra por las franjas blancas. Cómete los copos de nieve que encuentres y lánzate al suelo a hacer ángeles!. Llora por las cosas que te emocionan y vive la música en cualquier parte. Búrlate de todas las personas que intentaron hacerte daño, dedícales tu mejor sonrisa, y así se preguntarán, como después de todo, puedes seguir en pié.

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