Todo lo que hagamos, es decir, nuestras acciones serán tan efectivas como ambos deseemos que sean. Si detrás de cada cosa que hacemos, ponemos un objetivo concreto y repleto de sentido, entonces pondremos lo mejor de nosotros. Si nos desviamos, solo basta con echar una mirada al por que de lo que hacemos y de lo que sentimos.
Poseemos, incuestionablemente, el potencial de alcanzar todas las grandes cosas que queramos. Pero, para llevar a cabo ese potencial, tenemos que asegurarnos de que haya una fuerte conexión entre nuestro objetivo y las acciones que llevamos a cabo. Si tenemos una razón apremiante por la cual hacerlo, no sólo nos las arreglaremos, sino que también descubriremos que estamos repletos de compromiso y perseverancia para cuidar de ello hasta el final.
Sea lo que sea, que verdaderamente signifique algo para nosotros, será en lo que pondremos lo mejor. Y no hay mayor belleza que cuando eso ocurre.
Así que te propongo algo, pongamos en marcha todas aquellas cosas que realmente nos importan, y dejemos que nuestras acciones generen con certeza, magnifico resultados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario